Plegaria de un Hijo de Puta

No te creo. No creo en tus berrinches, en los alegatos, en tus escenas desagradables en público. Estoy cansado de las mentiras que me imputas, cansado de que cada vez que te mandas una cagada te pongas en el plano de la víctima. Te has metido en mi sistema nervioso, no te tengo más paciencia, quiero hablar y discutir cada vez menos contigo. Quiero perder menos tiempo contigo. Pero pese a esa crueldad, quiero entenderte, que nos llevemos mejor. Quiero creer cada cuento huevón con el que sales, cada tragedia que te ocurre por el solo hecho de que estuviste conmigo. Pero eres tú la que siempre la caga. Eres tú la que acuñó el cuento de Pedrito y el Lobo. No te creo. Anda, lúcete, cuéntale a todos que soy un hijo de puta, que soy aquí y allá. Cosa tuya.

Mientras tanto, yo a ti no te creo.

Si no te saludo, es weá mía.